En el séptimo día de la novena en honor de Nuestra Señora de Luján, patrona de los argentinos, el arzobispo de Buenos Aires y cardenal primado de la Argentina, Mario Aurelio Poli, rezó especialmente “por aquellos que están viviendo este tiempo de cuarentena lejos de sus familias”.
“Vamos a recordar aquella narración, que la tradición conservó como en un cofre: Las carretas, los bueyes, el negro Manuel que inspirado por Dios hizo bajar los cajones, en realidad fue un signo sencillo y humilde, pero el milagro de la Virgen, el verdadero milagro acontece todos los días desde hace casi cuatro siglos, porque la Virgen sigue atrayendo a su santuario multitudes de cristianos y cristianas y los bendice, los atrae con su ternura”, afirmó el purpurado.
“En este tiempo especialmente venimos a pedirle a la Virgen que no se olvide, como siempre se lo decimos en la oración: ‘No te olvides, Madrecita, de tu pueblo, que siempre te eleva la oración’ para que nos libres de todo mal, del peligro, de la pandemia, pero de todo mal, y especialmente que consueles y fortalezcas a aquellos que están lejos de sus familias”, rezó. “Este es un tiempo también de prueba, y sabemos que vos siempre estás muy cercana a las pruebas de tus hijos”, aseguró.